Por Sonia Rodríguez Fernández
Con una línea argumental bastante trillada, llega Tenemos
que hablar. David Serrano, director de Una hora más en Canarias, nos presenta
una caótica comedia bastante predecible. Como pareja protagonista nos
encontramos a Michelle Jenner y Hugo Silva, acompañados por el amigo de este,
Ernesto Sevilla, y los padres de ella, Verónica Forqué y Óscar Ladoire. La
película nos cuenta cómo Nuria, interpretada por Jenner, y Jorge, el papel de
Silva, son unos novios perfectos y él, trabajador de banco, da una serie de
consejos a sus suegros, llevándoles poco a poco a la ruina y, por el camino,
destrozando ambos matrimonios. Dos años más tarde, ella ha seguido adelante con
su vida junto a Víctor, interpretado por Ilay Kurelovic, con el que va a
casarse y para lo que necesita el divorcio con Víctor.
A partir de aquí, una serie de malentendidos y catastróficas desdichas, a cada cual más
absurdo que el anterior, hacen que la trama se complique hasta un punto que
hace que nos preguntemos cómo hemos llegado hasta aquí. Nuria, que necesita el
divorcio, llama a Jorge para decirle "tenemos que hablar" y desde
este momento todo pierde el sentido: Jorge se cae por una ventana, lo que hace
creer a Nuria, junto con otros momentos comprometidos, que su antigua pareja se
quiere suicidar por ella, por lo que intentará de todo, buscarle un trabajo o
reconciliarle con sus propios padres, para que este no pierda las ganas de vivir. Para
ello enrolará a todos a su alrededor, como sus padres, los cuales no quieren ni oír
hablar de Jorge, para que participen en esta charada hasta toparnos con un
final igual de absurdo y por todos esperado.
Con golpes de humor que a veces son acertados y otras veces pasan desapercibidos, la película se puede considerar entretenida para pasar una
tarde pero poco más. Verónica Forqué, sin duda lo mejor de la película desde su papel secundario, hace reír con su
naturalidad de siempre, que tan famosa se hizo por ejemplo en Pepa y Pepe. En
contraste nos topamos con un Ernesto Sevilla que se desenvuelve con una actitud
idéntica a la que que usaba en aquella
Muchachada Nui, con los mismos chascarrillos de entonces. Eso hace que su personaje parezca forzado y pierde así gran parte de su
gracia. En cambio, a aquellos a los que les guste ese estilo de siempre estarán en su salsa con su actuación.
Por su parte, la pareja protagonista, Jenner y Silva vuelven
a demostrar esa química con la que ya se desenvolvieron en Los Hombres de Paco, la serie que en su
momento tantas alegrías nos dio. Jenner, muy bien en su papel, demuestra que
desde que se estrenara esta serie, hace ya una década, ha progresado mucho en sus dotes interpretativas. Silva, eso sí, se muestra demasiado
artificial, demostrando que se le dan mejor las comedias más sutiles o papeles
más serios como los de El cuerpo o Musarañas. No hay que olvidarse del tercero en
discordia, Ilay Kurelovic, un desconocido actor argentino que demuestra una muy
notable actuación como novio incomprendido. Definitivamente, una comedia
española más para el olvido.
3 comentarios:
Wow por fin se de donde es ilay Kurelovic q tan desconocido no es pues estuvo en el anuncio de tresor con penelope cruz
Wow por fin se de donde es ilay Kurelovic q tan desconocido no es pues estuvo en el anuncio de tresor con penelope cruz
ahhh ahora se de donde es ilay kurelovic agentino y bien cooordooooobezzzzz!!!!!
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